Han pasado 90 años del inicio de la
última gran alarma sanitaria por una patología infecciosa aguda
como fue la pandemia de "gripe española". La hipótesis
más aceptada sostiene que el primer brote epidémico ocurrió en una
base militar norteamericana el mes de marzo de 1918 y que, las tropas
enviadas por ese país a Europa, a luchar en la Primera Guerra
Mundial, transportaron el virus al Viejo Continente, apareciendo los
primeros casos de gripe en Francia el mes de abril. Entre abril y
junio la primera onda epidémica se extendió por Europa y por el
este de Asia, tras atravesar el Océano Pacífico. En junio llegó a
Suramérica, en julio al Pacífico Sur y en agosto a la India y a las
costas africanas.
Pero la verdadera onda epidémica, la
más mortífera, fue la del otoño de 1918. El virus de la gripe,
mutado y extremadamente virulento, se difundió por Europa, las dos
Américas, África, Asia y Oceanía, causando millones de muertos en
todo el mundo, la mayoría de ellos a lo largo del mes de octubre de
1918. La estimación del número de fallecidos es muy complicada, ya
que las tasas de mortalidad por la gripe y sus complicaciones
respiratorias variaron de unas regiones a otras del globo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario